Existen numerosas modas que surgen con el objetivo de decorar nuestro cuerpo, hacerlo llamativo y original. Estas modas también han alcanzado nuestra dentadura y, entre ellas, se encuentran los piercings dentales.
Aunque reciben ese nombre, los piercings dentales no son exactamente lo que su nombre indica, pues no se realiza ninguna perforación. Se trata de una pequeña pieza de strass, a modo de pequeño brillante, circular, cuadrada, en forma de corazón, de cruz etc...
Suelen situarse en los incisivos frontales o laterales, concretamente en los superiores. Se colocan utilizando la misma técnica que se usa para fijar los brackets. Es un procedimiento indoloro y sencillo.
Es importante que el trabajo lo realice un odontólogo, ya que no todos los adhesivos son idóneos, si el trabajo no lo realiza un profesional, el esmalte puede resultar dañado. Aunque el piercing dental pueden llegar a durar hasta seis meses, es recomendable sustituirlo el adorno cada tres. También es posible retirarlo antes de ese plazo si se desea.
Famosos como Madonna o Simply Red llevaron este pequeño adorno en su momento. La moda surgió en Estados Unidos, se trasladó a Europa y, en la actualidad, tiene un gran éxito en los países latinoamericanos.
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